¿Una playa desierta o una playa cerrada?

A punto de reabrir los negocios, aparece una nueva necesidad cuanto a marketing. Ya no vale sólo enseñar lo bonito, apetecible o que se come bien, también hay que transmitir que es un sitio seguro y en cuál se está tomando todas la medidas de seguridad para la salud de los consumidores. Incluso los mismo visuales que antes hacían soñar, hoy pueden tener otro significado. Arena blanca y agua turquesa, con nadie: ¡un sueño! Pero ahora puede parecer una playa cerrada. Los negocios se encuentran en la tesitura de analizar a todo sus bancos de imágenes para ver las que pueden tener un doble significado y promover otro tipo de visuales que transmitan experiencia real y de disfrute, matices de privilegio y a la vez no dejen cabida a mala interpretación cuanto a seguridad sanitaria se trata.
Todo el mundo habla de nuevas oportunidades por la situación. ¿Cuántos serán capaces de superar los miedos de las pérdidas económicas actuales e invertir, que es lo más importante ahora mismo para salir adelante? Hay que transmitir que se puede soñar aunque haya una nueva realidad.